Despierto tan temprano, que la mañana se me alarga puro resorte. Y, tal cual, me revienta en la cara tipo 10am que ya sólo quiero hacer siesta.
Tenemos el privilegio de ahuyentar a la oscuridad con luces artificiales. Pero como con todo lo bueno, lo abusamos y ahora la humanidad entera padece de trastornos del sueño. No es normal decir que uno no es “morning person”, si nuestros antepasados sólo hacían su vida con el sol. Los seres humanos somos animales diurnos, pero nos detestamos y pasamos despiertos la mitad de la noche.
En días como hoy, que del sol ni un rayo y sólo hay una frazada de nubes permanente en el cielo, yo sólo quiero dormir. Tal vez mi antepasado lejano fue un pollo y no un mono.