El fútbol es un deporte que no me gusta. Me aburre sobremanera. Siento que es lento e impreciso. En resumen, prefiero ver otra cosa. Pero… es la pasión del Canche y me regala 90 minutos de estar juntos.
Las relaciones y su estira y encoge nos hacen expandernos. Nos ponen en la disposición de probar cosas distintas. Y de crecer al entender al otro. No por nada la mejor forma de conocer otra cultura es a través de su comida.
Estoy feliz de haber pasado este momento con el Canche. Y lo vuelvo a hacer todas las veces que pueda. Aunque siga sin gustarme el futbol.